PX, el fruto de unos héroes

Vendimia, momento clave

Estamos en época de vendimia, etapa clave en la elaboración de vinos.

Un periodo que no sólo abarca los días concretos de “corta” de racimos, sino también días previos, necesarios para ir afinando mediante análisis y catas de uvas, el momento exacto para iniciar la recolección, para que todos los mimos y cuidados que ha tenido la vid durante el año podamos encontrarlos en unas magníficas uvas en su justo momento.

Cortar, Extender, Volteo y Recoger

La vendimia es siempre muy exigente, pero estos días me he detenido a reflexionar una cuestión: ¿Cuántas veces tiene que acudir el personal al viñedo y a la pasera para que podamos disfrutar del mejor vino dulce del mundo?

Pues sí amigos, ni una ni dos. Esto no es una novedad, ya os conté la elaboración del PX en dos artículos de vinacrucis que os enlazo por si queréis echadle un nuevo vistazo: PX, la dulce joya enológica I y PX la dulce joya enológica II.

Elevadas Temperaturas en Septiembre

Lo que si ha sido una novedad este año son las tremendas temperaturas alcanzadas en los primeros días de Septiembre, justo en época de vendimia y con uvas en pasera, y claro, todos nos hacemos la misma pregunta: ¿Cómo afecta dicha temperatura? ¿la uva se asolea o se “achicharra”? ¿Cómo será el PX de la cosecha 2016, que sin duda será recordada por un calor de record?

El proceso se acelera

La realidad es que al haber más temperatura el proceso, que normalmente tarda de 7 a 10 días con volteo incluido, se ha adelantado en algunos días, siendo necesario un esfuerzo tremendo por parte del personal destinado a estas labores.

A los pocos días de cortar los racimos y extenderlos, tienen que volver a darle la vuelta al racimo y de nuevo otra vez a recogerlo en cajas. Y todo bajo unas temperaturas entre 46 y 48 grados, valga como testigo dos fotos mías, de mi coche y de un termómetro en Córdoba, el cual se ha llevado más fotos que la propia Mezquita-Catedral.

Vendimia heroica

Me gustaría que se reconociera el esfuerzo de todas esas personas que ataviadas con protección para el abrasador sol de la campiña han salido cada mañana a trabajar, para que  dentro de unos meses disfrutemos de un gran vino, el fruto de unos héroes.

He leído artículos sobre vendimias heroicas y no es para menos, al tener las viñas plantadas en laderas con una verticalidad tremenda y de complicada y peligrosa recolección.

Tiene un gran mérito lo que hacen en la Axarquía malagueña, en Rías Baixas y en tantos otros lugares, pero a través de este artículo me gustaría ampliar dicho título de “heroica” a la vendimia de la Pedro Ximenez y su pasera, por soportar esas condiciones tan extremas, a las que solo los héroes pueden resistir.

Gracias, toda mi admiración para vosotros. Cuando tenga el primer PX del 2016 en mi copa, la levantaré a vuestra salud, a la salud de los héroes de la pasera.

Salud!